Ana Lilia Ramírez
TECATE.- La titular de la Comisión Estatal del Sistema Penitenciario de Baja California (CESISPE), María Elena Andrade Ramírez, dio a conocer que al interior del Centro Penitenciario El Hongo I prevalece un ambiente de orden, paz y tranquilidad, además se le ha dado continuidad a las acciones del proyecto de reinserción social de la población.
Aseguró que, el Centro Penitenciario El Hongo I se encuentra trabajando con toda normalidad, mientras que el suministro de servicios y el desarrollo de las actividades se realizan de la manera habitual, dando cumplimiento con lo que establece la Ley Nacional de Ejecución Penal, así como con los lineamientos de la gobernadora, de procurar el bienestar de las personas privadas de la libertad con estricto respecto a sus derechos humanos.
“La población penitenciaria del centro se encuentra cumpliendo con los programas y las actividades a favor de su reinserción social, a través de los ejes fundamentales que son: educación, salud, deporte, trabajo y capacitación para el trabajo, basado en que es un proceso continuo y que se debe seguir al pie de la letra para llevar a buen puerto y con efectividad, la reincorporación a la sociedad”, dijo la comisionada.
También, indicó, continúa el acceso al servicio de telefonía, a través del cual mantienen la cercanía con sus familiares, que les permite fortalecer ese vínculo inquebrantable mediante el cual reciben apoyo, ánimo y entusiasmo para seguir trabajando conforme al plan de actividades que llevan en lo individual.
Destacó que se ha trabajado mucho y con estricto apego al respeto de los derechos humanos en la transformación del Sistema Penitenciario en todos los aspectos: atención médica, cambio de alimentación, actividades para impulsar el desarrollo personal y laboral, atenciones jurídicas y modificación a los protocolos de seguridad, todo para mejorar las condiciones de vida del total de la población penitenciaria que rebasa las 15 mil personas en un ambiente de paz y gobernabilidad.
Por último, dijo: “queremos tener centros penitenciarios en paz, donde prevalezca la gobernabilidad, donde todos puedan vivir en convivencia y aprovechar los programas de reinserción social que se les ofrecen”.
